No importa cuál sea tu origen, Dios te ama. Incondicionalmente. Jesús vino a este planeta por todos nosotros.
"Respondió Jesús y les dijo: "Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. No he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento".
- Lucas 5:31,32